Suena el
teléfono y lo descuelgo.
-Diga.
-¿Es usted
don José Siles?
-¿Qué
desea?
-¿Pero es
usted don José?
-¿Y usted
quién es?
-Pues yo
soy Ramiro, don José, del Centro de Atención Otológica.
-No,
gracias, lo siento, no estoy interesado.
Y cuelgo, sintiéndome
vejado y acosado.
Cualquier día recibimos una llamada del Instituto de Callicidas de Madrid.
ResponderEliminar¡¡Qué barbaridad, Don José!!