lunes, 23 de julio de 2018

ROMPIENDO PAPELES


Me pesan, me agobian, los folletos, facturas, resguardos, cartas, diplomas y apuntes que, cada vez más secos, se perpetúan en mi archivo. Me agobian porque cada vez  siento mayor la urgencia de prescindir, de destruir, la mayor parte.

Pero cuesta, a mí me está costando romper documentos que certifican actividades, ambiciones, logros y esparcimientos a lo largo de toda mi vida. Vivencias que a mí me emociona ver registradas, aunque sean de poca monta la mayoría.

Son papeles tan personales que su destino natural es el ser destruidos más o menos indiscriminadamente. Difícilmente tendrán interés para los demás. Su destino irremediable –y comprensible- es la boca de un contenedor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario