viernes, 13 de enero de 2023

Dª PAQUITA

-Doctor, me duelen las rodillas, me duele la espalda, no duermo bien...-Sí, Dª Paquita, pero yo le digo que para su edad no puede usted quejarse... A lo mejor le convendría distraerse un poco más. Verse con sus amistades. 

-¡Si apenas me quedan ya!

-¿Y sus hijos?

-Están muy ocupados, tienen su propia familia, me llaman alguna vez...

-¿Ve usted la tele?

-Mucho, pero termina por cansarme.

-Hay quien se compra un animal de compañía.

-Tuve un perrito: se murió, una pena.

-¿Pues sabe lo que es una buena idea?

-Los pasatiempos, los juegos de palabras.

    Y así fue cómo, al parecer, en los clásicos kioscos callejeros empezaron a florecer y multiplicarse los cuadernos de crucigramas, los autodefinidos, las sopas de letras, los sudocus y los cruzados, mientras las pilas de diarios de noticias bajaban. Claro que algunos kioscos, reconvertidos en bazar. venden ya también paraguas, bastones, juguetes, caramelos, pilas, bolígrafos... 

No hay comentarios:

Publicar un comentario